Independientemente de las reseñadas en el apartado «cómo se financia», la forma más eficaz, cómoda y con resultados duraderos sería su adhesión al grupo de «FAMILIAS COLABORADORAS», mediante el cual la Parroquia, con su autorización (mensual, trimestral o anual), les adeuda en su cuenta corriente una cantidad que previamente han autorizado.
Como resultado de esas aportaciones, en estos diez últimos años se ha restaurado el templo y el Patronato, cuyo costo global superaron los 400.000 Euros.
Ligada a la colaboración monetaria, y no menos importante, existe la colaboración personal: con nuestro servicio, con nuestro tiempo, con nuestra dedicación y con nuestro amor a los demás. Y es muy fácil, tan sólo hay que comentarlo con cualquier sacerdote o componente de algún grupo de la parroquia.